Se impuso el Ozzieball

Guillen sigue pasando la escoba

Los Medias Blancas quieren dejar atrás su propia maldición, su gente se anima y olvida a los Medias Negras.

Chicago se apoyó en el venezolano Freddy García y la ofensiva de Paul Konerko para derrotar a los Campeones de Boston y eliminarlos en la carrera a la Serie Mundial.

Pero lo más importante dentro del terreno fue el relevo que realizó el Duque Hernández, quien contuvo a la ofensiva patiroja que venia embalada a voltear el encuentro. Con las bases llenas dominó a Jason Varitek y a Tony Graffanino que conectaron unos elevados inofensivos y puso el punto final de la entrada y con la amenaza de Boston al ponchar a Johny Damon.

Después de eso Hernández nuevamente en su carrera fue clave en cortar el ascenso de los Medias Rojas en la competición. Hay que recordar la postemporada de 1999 cuando el Duque militaba con los Yanquis y en el quinto juego solo permitió una carrera en 7 innings para eliminar a Boston 4 a 1 en la final de la Liga Americana.

Dejamos el para el final a lo que creemos es lo mas importante en este club que regresa a los éxitos en la postemporada, no ganaban una serie de playoffs desde 1917. Es mucho lo que hay que celebrar en Chicago y evidentemente gran parte se lo deben al bocazas criollo (Guillen) que con su desempeño confirma que debe ser el manager del año.

El piloto venezolano logró amalgamar una novena que creyó en si misma, les dio respeto a sus jugadores y mucha confianza. Muestra de ello fue el toque suicida con el que anotaron la última carrera del encuentro que los coloca en la privilegiada posición de esperar a Yanquis o Angelinos.

Ozzie transmite mucha energía dentro del dogout, vive cada instante del juego, es un perro de presa, no suelta su victima hasta que ya la ha doblegado. Ejemplo de eso la forma como presiono al Umpire principal ante lo reducida de su zona de strike.

Seguimos a la expectativa de los resultados de estos Medias Blancas que pueden dar a Venezuela el primer piloto ganador del Clásico de Octubre, si así ocurriere veremos si Guillen da muestras de consistencia en sus palabras cuando afirmó que si ganaba la Serie Mundial dejaba a los Medias Blancas.

Seguimos en contacto porque el béisbol es vida.