Los Leones ahora son de Venezuela

Once años tuvieron que esperar los caraquistas para obtener un nuevo campeonato culminando así la mas larga sequía que ha vivido la novena mas ganadora de la pelota criolla, el magallanero Carlos Guillen cargó con el Mas Valioso de la final y no podrá acompañar al conjunto a la Serie del Caribe

Domingo de béisbol y no solamente de pelota sino de final, el estadio universitario se puso full a reventar como no estuvo nunca en los juegos anteriores. Todo era felicidad para los aficionados caraquistas que poblaban los espacios sin dejar nada libre.
“Solo un triunfo mas y los Leones serán nuevamente campeones, es mucho tiempo sin saborear las mieles del triunfo” expresaba antes de oír la voz de play ball, un fanático uniformado con el número 17 que usaba el fallecido “Chico” Carrasquel, en cuyo nombre se jugó la zafra recién culminada.
Los cabalísticos daban por logrado el decimosexto campeonato, porque justamente un 29 de enero en el año 1995 apoyados en la inspiración de Omar Vizquel los Leones del Caracas ganaban su último gallardete.
Otra coincidencia de la historia fue aquella final del año 87-88 en la cual los melenudos derrotaron en su sede del Universitario, en seis juegos a los mismos Tigres de Aragua, siendo está la última vez que lograron titularse en su casa, Urbano Lugo Jr y Ubaldo Heredia fueron los lanzadores claves para dejar a David Concepción y compañía con las ganas.
Así las cosas los aficionados ponían electricidad en las tribunas y provocaban un maremoto con cada vuelta que daba la ola humana inning tras inning, el joven Albert Vargas respondía a la confianza depositada en él por su piloto Carlos Subero.

Reacción milagrosa
Nadie apostaba ni un céntimo a los Leones, seguramente tenían razón. Los capitalinos tenían mucho talento pero la juventud generaba muchísimas dudas que atentaban contra su favoritismo y si a eso adicionamos las lesiones y fatigas de sus lanzadores más importantes, más oscuro lucia el panorama.
Transcurridos doce juegos del Round Robin el récord “Melenudo” era de seis triunfos y la misma cantidad de derrotas, restaban cuatro encuentros dos en casa frente a Cardenales y Magallanes respectivamente, y la visita al paraíso del béisbol contra los Caribes.
Había que ganarlos todos y no se contaba con Armando Galárraga ni con Wilfredo Ledezma, el conjunto jugó en equipo cada uno hizo lo suyo, pero sobre todo los brazos jóvenes de Rómulo Sánchez, Franklin Morales, Orlando Trías y el refuerzo Albert Vargas, sacaron la cara por el Caracas orientados por el capitán y líder Henry Blanco, convirtiendo su mayor debilidad en una gran fortaleza para clasificar a la final con la misma marca que los Tigres 10 y 6.
Los refuerzos fueron fundamentales en el round robin, Alex Cabrera cargó con la ofensiva, Francisco Rodríguez no permitió libertades y lo mejor del novel Vargas estaba por verse. La gerencia no se quedo tranquila con eso y para la ultima instancia trajo de sus eternos rivales a Geremi González, para que fungiera como abridor, llegó se subió al morrito y ganó el segundo juego de la final en Maracay, después de haber desempeñado funciones como cerrador con los Navegantes, también consiguió a Carlos Guillen quien con gran profesionalismo defendió los colores del Caracas al extremo de ser considerado el Mas Valioso después de empujar 7 carreras con un jonron y 3 dobles, dejando average de 368.
“Me di cuenta de que este equipo era el campeón cuando entre por primera vez al dogaut. En ese momento sentí la química y yo vine a esto a tratar de ser campeón y lo logre” dijo Carlos Guillen al momento de recibir su premio.
La final no era tarea sencilla, Aragua había derrotado con facilidad a los Leones durante todo el año, diez veces en doce encuentros y para colmo de males Tony Armas quien se caso durante la final, no estuvo bien en el primer encuentro facilitando la labor a los felinos aragueños que continuaron con su aplique contra el Caracas.
A partir de el segundo encuentro todo cambio, los muchachos tomaron el mando e impusieron su ley, los Leones armaron una maquina bien engranada que se componía de pitcheo abridor y relevo, defensa y bateo oportuno, todo esto dirigido magistralmente por Carlos Subero.
Cuatro triunfos en fila permitieron a los Leones devolverle la música a sus fanáticos que gritaban con fuerza “Ahora tigrito tomate tu sopita” y atrás dejaron los cánticos de las barras bravas argentinas y retomaron las letras del popular “Chivita” Lezama, ¡A la bin, a la ban, a la bimbomban, Caracas, Caracas, rarara!
Así se le puso punto final a un campeonato emocionante lleno de alternativas, que dejo claro el talento emergente que hay en el país. Los Leones del Caracas cuentan con una nomina muy joven que les garantizara junto a su manager campeón de menor edad, que contaran en el futuro porque al parecer se inicio una era.

La Serie del Caribe
Ya convertido en el campeón de la pelota criolla, los Leones del Caracas se preparan a partir de hoy en el estadio Universitario para enfrentar a sus rivales de República Dominicana (Licey), México (Venados de Mazatlán) y Puerto Rico (Gigantes de Carolina) en la tradicional Serie del Caribe que se jugará entre el 2 y el 7 de febrero en los estadios “José Pérez Colmenares “y “José Bernardo Pérez”, de Maracay y Valencia, respectivamente.
La gerencia “Melenuda” seleccionará a los refuerzos para el clásico regional. Se mencionan entre los candidatos, a los jardineros Endy Chávez y Juan Rivera, a los pitchers Elio Serrano y Víctor Zambrano y al receptor-inicialista Ramón Hernández y solicitan de los Angelinos de Anaheim de Los Ángeles el permiso para que pueda actuar el cerrador Francisco “Kid “Rodríguez.
El Mas Valioso de la final, Carlos Guillen está descartado ya que los Tigres de Detroit solo le permitieron participar en un solo evento internacional, es decir, la Serie del Caribe o el Clásico Mundial, por ello el infielder desistió jugar con el Caracas, prevaleciendo en su interés la Vinotinto.